"Alan Wake" se destaca por su narrativa envolvente, su atmósfera de terror y su mecánica de juego basada en la luz. Los jugadores utilizan linternas, bengalas y otras fuentes de luz para debilitar a las Sombras antes de poder dañarlas con armas convencionales. La historia se desarrolla como un thriller psicológico, con giros y vueltas en la trama que mantienen a los jugadores en vilo hasta el final.
El juego ha sido elogiado por su narrativa, su atmósfera y su mecánica de juego innovadora, convirtiéndolo en un título de culto dentro del género de terror. Además, ha inspirado a una secuela y otros proyectos relacionados con la franquicia.